No es ningún secreto que las dietas son un asco. Tú la odias porque te hace sentir malhumorado, fuera de control y privado. Tu pareja la odia porque suele suponer un paréntesis en vuestras visitas a vuestros restaurantes favoritos, porque se os corta la mecha y porque la meticulosa preparación de las comidas reduce vuestro tiempo de "Netflix y relax". Aunque todos lo odiamos, volvemos a hacer dieta una y otra vez. ¿Por qué?

Estamos rodeados de mensajes que nos hacen cuestionar nuestro juicio cuando se trata de la comida. Ahí es donde entra en juego la alimentación intuitiva. Este estilo de alimentación promueve la escucha del cuerpo y el aprendizaje de la diferencia entre el hambre física y la emocional. El principio básico es que comes cuando tienes hambre y paras cuando estás lleno. Aceptar que tu cuerpo es la mayor autoridad sobre cuándo, qué y cuánto comer es contracultural a estas alturas. Decidir seguir tu propio camino y desarrollar una relación de confianza con tu cuerpo no es tan sencillo como los influenciadores del body-positive podrían hacerte creer. Pero, si estás aburrido de todos los inconvenientes de las dietas y te preguntas si la alimentación intuitiva podría ser adecuada para ti, aquí tienes algunas cosas que deberías saber.

  1. La alimentación intuitiva no es intuitiva para la mayoría de la gente, especialmente para aquellos de nosotros con un historial de dietas.

Contrariamente a la creencia popular, la alimentación intuitiva es más complicada que comer cuando se tiene hambre y parar cuando se está lleno. Después de toda una vida en la que nos han enseñado a temer la comida "tentadora" o "mala", hay que esforzarse mucho para aprender a confiar en uno mismo con la comida. Esto lleva tiempo y suele requerir el apoyo de personas con ideas afines.

  1. La alimentación intuitiva es una forma segura de mejorar tus problemas de confianza.

¿Qué quiero decir con problemas de confianza? Me refiero al miedo a no ser querido, a no ser digno o a no estar preparado para lo que la vida te depare. Cuando miras a tu cuerpo varias veces al día para decidir qué es lo que te conviene, tu confianza en ti mismo crece de forma natural con el tiempo.

Aprenderás a dejar de poner en suspenso tu felicidad y empezarás a confiar en que eres capaz de tomar decisiones independientes. Aprenderás a confiar en tu propio juicio, ya sea para elegir una galleta en lugar de una ensalada o para quedarte en casa y relajarte en lugar de salir con los amigos.

  1. Practicar la alimentación intuitiva no significa que vayas a perder peso.

Aunque las personas que comen de forma intuitiva tienen más probabilidades de mantener un peso estable a largo plazo, comer de forma intuitiva no significa que vayas a perder peso. Algunas personas experimentan un aumento de peso mientras aprenden a confiar en sí mismas en torno a la comida. Esto puede molestar y asustar a las personas que han pasado años persiguiendo la delgadez.

Lo que realmente hacen los comedores intuitivos es aprender a darse cuenta de lo que necesitan, respetar esa necesidad y escuchar las señales del cuerpo antes de tomar decisiones alimentarias. Aunque la alimentación intuitiva no consiste en ignorar el hambre ni en dar luz verde a atracones que te hacen sentir mal, recuerda que lo que tú crees que es tu peso ideal y lo que tu cuerpo sabe que es tu peso ideal no siempre es lo mismo. Comer de forma equilibrada puede llevarte a una forma corporal que has sido entrenado para rechazar.

  1. La alimentación intuitiva puede desencadenar en ti algunas asociaciones traumáticas con las dietas y la imagen corporal.

Aprender a aceptar tu tipo de cuerpo puede ser un largo camino. Si tienes antecedentes de trastornos alimentarios, no puedes embarcarte solo en este viaje. Si te sientes desencadenado mientras experimentas con la alimentación intuitiva, ve despacio y busca el apoyo de un terapeuta o dietista de peso neutro con formación en alimentación intuitiva.

No todo el mundo está en un momento de su vida en el que la alimentación intuitiva sea lo suyo, y eso está bien.

  1. La alimentación intuitiva puede cambiar tu vida por completo.

Puedes estar seguro de que amigos, familiares y conocidos ocasionales compartirán libremente sus opiniones sobre tu viaje hacia la alimentación intuitiva. Aprender a mantener los límites y hacer lo que crees que es mejor te conectará contigo mismo de una forma que la mayoría nunca experimentará.

Aunque lleva tiempo y no es fácil, el nivel de libertad que experimentas cuando tu instinto/intuición toma la decisión final sobre todas las decisiones de tu vida no tiene precio.

La alimentación intuitiva es una alternativa saludable y sostenible a las dietas y los ciclos de adelgazamiento. Empezar tiene sus dificultades, pero adoptar este enfoque a largo plazo puede dar grandes beneficios. Este año, ¡pruébalo por ti mismo!

Dalia Kinsey

Dalia Kinsey

Dietista
Dalia Kinsey es una dietista negra queer, conferenciante, creadora del podcast Body Liberation for All y autora de Decolonizing Wellness: A QTBIPOC-Centered Guide to Escape the Diet Trap, Heal Your Self-Image, and Achieve Body Liberation. En una misión para difundir la alegría, reducir el sufrimiento y eliminar las disparidades de salud en la comunidad LGBTQIA + y BIPOC, Dalia rechaza la cultura de la dieta y enseña a la gente a usar la nutrición como una herramienta de autocuidado y empoderamiento personal para contrarrestar el daño de la opresión sistémica. Dalia trabaja en la intersección del bienestar holístico y la justicia social, creando continuamente herramientas y recursos de bienestar que se centran en los más vulnerables, las personas que tienen múltiples identidades marginadas. El trabajo de Dalia se puede encontrar en https://www.daliakinsey.com/